Cómo hacer el ensayo-“inguesú”
El profesor
(o sea, el que esto escribe) califica tres aspectos del ensayo; que, en orden de importancia, son:
1. La
calidad de las fuentes
2. La
estructura del ensayo mismo
3. La
propiedad en el uso del lenguaje
1. Del ensayo y las fuentes
El ensayo
debe constar de tres cuartillas (Normal, Times New Roman, 12 puntos); o
bien, mil doscientas palabras escritas por el estudiante: nada de “copy-paste”.
Esto excluye la, o las páginas en donde se consigne la bibliografía: 1 200 palabras propias.
Las citas
bibliográficas de Internet, al igual que las impresas, deben contener tantos elementos identificatorios como sea posible:
autor del artículo, título del mismo, fecha de elaboración del artículo, nombre del sitio Internet, el URL del sitio y la
fecha de consulta. No debieren ustedes (o sea, los que van a escribir el ensayo) consignar sólo el URL, porque la cita estará
incompleta. La bibliografía la pondrán al final del texto, en orden alfabético.
Desde luego,
la bibliografía debe reflejarse en el contenido del ensayo. Evitarán poner una lista enorme para intentar impresionar al profesor;
si no la hubieren estudiado, y si no hubieren hecho buen uso de ella. Utilicen sólo fuentes serias: la Internet contiene,
sobre todo, basura.
Mi insistencia
en el buen manejo de fuentes, es porque el profesor (el de la “Mí” del inicio del párrafo) quiere que usen la
biblioteca y la Internet para algo provechoso; en lugar de lo que normalmente hacen (¡je-je-jé!).
Todo el
texto deberá ser redactado por el estudiante e ir acompañado de referencias; pero no de citas textuales. El profesor
calificará el trabajo de ustedes mismos, no el de quienes hubieren citado; y tiene una opinión asaz desfavorable de aquellos
estudiantes cuyas páginas están llenas de rollos copiados. ¡Redáctenlo todo ustedes, por sí mismos!.
En otras
palabras: las tres páginas deberán contener sólo ideas propias del estudiante, basadas en la información recopilada. Podrán
poner las referencias a pie de página, o al final del ensayo.
Asimismo,
podrán ahorrarse los fólderes y otros maquillajes embellecedores, y usar hojas recicladas incluso, si así se los dictare su
conciencia ecológica.
2. De la estructura del ensayo
Un ensayo
de tres cuartillas (o mil doscientas palabras) es casi la medida límite para tratar un solo tema. Así que éste debe contener
mínimamente: una introducción, en la que se anuncia el contenido del ensayo, un desarrollo, en el que explica
el tema mismo, y una conclusión, en la que se indica el resultado final.
El profesor
(que sigue siendo el que esto escribe) demanda un tratamiento directo del tema, sin rodeos, ni vericuetos. El estudiante deberá
responder directamente a la cuestión planteada.
3. De la propiedad en el uso del lenguaje
El que ya
casi concluye de redactar este rollo sobre el ensayo-“inguesú”; o sea el profesor, ya rebasó el regocijo inicuo
de contemplar qué mal redactan ustedes; ya ni sonríe cuando lee “ingles” en lugar “inglés”; ni se
detiene a pensar que acaso sea un problema hormonal, más que ortográfico.
Pero sí
se encuentra sumamente preocupado por el visible retroceso nacional, a nivel universitario, en el uso del lenguaje. Justamente
por eso, les pide un ensayo de tres, sólo tres cuartillas bien escritas.
Cada vez
que ustedes mal usen un acento diacrítico (“día…qué”?; “¿cuál día?”), cada vez que incurran
en horrores de ortografía, de concordancia, o que cambien de sujeto a media oración, etc., estarán renunciando, automáticamente,
a una calificación excelente.
No olviden
identificar las hojas de su ensayo, indicando a qué curso se refieren (el profesor imparte varios), y solamente con
su número de estudiante: no pongan su nombre. ¡Y entreguen el ensayo a tiempo!.
Más consejos
de redacción:
1. Existen
muchos y excelentes diccionarios; ¡sírvanse de ellos, por favor!
2. Además,
hay libros varios como el de: Escalante, Beatriz. Curso de Redacción para escritores y periodistas, 6ª. ed. México, Porrúa.
2002.
3. Y también
pueden consultar, en línea, el sitio de la Real Academia, cuyo Diccionario de la Lengua
Española les ofrece, por cierto, la oportunidad de crear un icono en la pantalla de su ordenador, para facilitar las consultas.
http://www.rae.es/
San Andrés Cholula, 31 de marzo del 2006.